lunes, 12 de septiembre de 2011

ENRIQUE SORIANO, 100 años.

Enrique Soriano, un belmezano con una infancia difícil, celebra 100 años

Con 6 años empezó a trabajar tras morir su padre. Ahora, 94 años después, celebra su centenario en Cerro Muriano rodeado de toda su familia
Sus comienzos no fueron fáciles. Quizá por eso la vida le está mostrando una cara más amable en este tramo final. Y es que Enrique Soriano Sánchez tiene lo que todos desearían con su edad. A sus 100 años, goza de buena salud física y mental, cuenta con la compañía de su mujer y el cariño de su familia. Este belmezano que vino al mundo el 11 de septiembre de 1911 logró reunir ayer a cuatro generaciones en el restaurante Los Pinares de Cerro Muriano, donde estaban convocados para celebrar su cumpleaños sus 2 hijos, 7 nietos, 15 bisnietos y yernos, además de los miembros de otra familia que marcó su vida, los Daza.
Con solo 6 años tuvo que enfrentarse a su mayor tragedia, la pérdida de su padre en un accidente en las minas de Belmez. Entonces, su madre se vio obligada a sacarlo adelante y a sus cuatro hermanos --fallecidos ya-- limpiando casas por la mañana y elaborando por la noche dulces que él mismo vendía por las calles, a pesar de su corta edad. Esos primeros pasos le condujeron a una panadería, donde, desde los 10 a los 13 años, fue peón hasta que cambió los panes y los dulces por el mármol. Entonces entró en escena la familia Daza, a la que está muy ligado desde que empezó a trabajar en su taller de mármoles y a la que considera como su familia, ya que entre todos lograron sacar adelante el negocio tras la prematura muerte de Serafín Daza, que también dejó 7 hijos.
El 2 de febrero de 1938, en plena Guerra Civil, vivió una de las jornadas más felices de su vida. Ese día se casó con la mujer que le ha acompañado durante 73 años, Elvira Márquez Vioque, vecina de Dos Torres, que tiene ya 97 años. "La conocí en un baile durante la mili", recuerda Enrique con una sonrisa de añoranza en su boca. Tatuado en su mente conserva cada detalle de esa noche.
Con Elvira tuvo dos hijos, Angel, que se casó con Josefa y les ha dado cinco nietas; y Juani, que contrajo matrimonio con Desiderio y les ha brindado otras dos más. Su hijo Angel, de 73 años, emigró a Mérida, pero Juani, de 69, se quedó aquí. Desde hace 40 años, Enrique y Elvira viven en Córdoba --también pasan temporadas en Cerro Muriano--, en un piso de la Huerta de la Reina contiguo al de Juani y Desiderio, que no les pierden de vista. "Estoy a gusto en Córdoba", confiesa Enrique, para después matizar que "la verdad es que estoy bien en todos los sitios".
Aunque se ayuda de un bastón para caminar, su hija Juani asegura que "está muy bien", tanto que cuando se encuentra en Cerro Muriano con Angel van a pescar casi a diario a un pantano. Angel procura viajar todos los meses a Córdoba para ver a sus padres y compartir con Enrique su pasión por la pesca.
Ayer fue un día muy especial para Enrique y Elvira. Al revuelo inicial de los reencuentros, siguió el ajetreo de la fiesta en el restaurante, a la que solo faltó una de sus nietas que vive fuera. Al apagarse las velas, se escapó un deseo unánime: que Enrique cumpla 101 años y muchos más y que Elvira y toda esta familia estén con él para celebrarlo.
fuente: Diario Córdoba

1 comentario:

Cloti dijo...

Juani soy cloti, no te puedes imaginar, la sorpresa que me he llevado al ver a tus padres, me alegro mucho que aun los tengáis con vosotros, y podáis disfrutar de ellos, al verlos me han venido a la memoria, un montón de recuerdos de nuestra infancia en la calle hoyancones, han pasado muchos años, pero hay recuerdos que estarán siempre con nosotros, felicidades para tus padres, y también para vosotros, por tener la suerte de tenerlos a vuestro lado, dales un abrazo de mi parte, también para ti y tu familia.
(cloti )